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Síndrome de Muerte Súbita del Lactante


¿Qué es el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante?

El Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL) es la muerte repentina, inesperada y sin causa aparente de un bebé que parece sano. Suele ocurrir cuando los bebés están dormidos, por ello también se conoce como «muerte en cuna» o «muerte blanca». Es una de las causas más comunes de muerte en bebés menores de un año.

¿Cuáles son las causas?

Aunque se ha investigado mucho sobre el SMSL, todavía no se conoce con certeza su causa. Hay muchas teorías, incluyendo problemas con el sueño, la alimentación, los problemas cardíacos y la falta de oxígeno. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la causa exacta del SMSL sigue siendo un misterio.

¿Cuáles son los factores de riesgo?

Aunque el SMSL puede ocurrir en cualquier bebé, los investigadores han identificado como posibles factores de aumentar el riesgo:

  • Bebés prematuros o de bajo peso.
  • El género masculino tiene más probabilidad que el femenino.
  • Tener antecedente de SMSL en la familia.
  • Temperatura ambiente de la habitación.
  • Fumar o consumir drogas durante el embarazo.
  • Bebés expuestos a inhalar humo pasivamente.
  • Colocar al bebé para dormir boca abajo.

¿Qué se puede hacer para prevenirlo?

Aunque no existe ninguna pauta que garantice el SMSL, hay algunas medidas que se pueden tomar para reducir el riesgo:

  • Colocar al bebé para dormir boca arriba.
  • Usa una cuna con colchón firme, sin almohada y libre de objetos durante el primer año de vida.
  • Controlar la temperatura del ambiente, entre 16º y 20º.
  • Que el bebé duerma en tu habitación, pero en su cuna independiente.
  • Lactancia materna.
  • El uso de chupete.
  • No fumar durante el embarazo ni en lugares donde esté el bebé una vez nacido.
  • Mantener un seguimiento regular con el pediatra.

Conclusión

El Síndrome de Muerte Súbita del Lactante es aterrador y aún poco comprendido. Aunque no se conoce una manera segura de prevenirlo, es importante conocer los factores de riesgo y tomar medidas para reducir la posibilidad de que ocurra. Si tienes alguna preocupación sobre la salud de tu bebé, habla con tu pediatra.